¿Dónde estás big brother?

(sobre ¿Dónde estás hermano? de Joel y Ethan Coen)

Autor: Sebastian Russo 

            Joel. Ethan. The big brothers Coen. No hay rencillas. No hay entramados ocultos. No hay intrigas. The big brothers Coen no arman engranajes oscuros para saber quién será el próximo en irse del set de filmación. Ni especulan cínicamente con algún voto externo que desbanque a algún camarógrafo o iluminador o escenógrafo. Solo son. Es decir, son. Y a pesar de que se puede ser de distintas formas, ellos siempre son. Y aparentan ser, y lo logran, es decir, nos hacen creer siempre que verdaderamente son, y eso que solo están aparentando, pero no importa son, de mentiritas o no, son. Existen maneras de ser dije, y es así. Existen formas que permiten explayar con mayor lucidez el propio ser, y otras que lo esconden (digo, a ese propio ser) Hay maneras que posibilitan que cada movimiento, cada acción sea una indeleble marca personal, y hay otras en que el camino elegido (desviándose de la panamericana, por ruta de ripio) no es el más eficaz (eficacia en términos de coherencia), ni el más feliz (felicidad en términos de felicidad)             ¿Dónde estás hermano? parece ser la pregunta que íntimamente se hace Ethan Coen (el escritor de la dupla) sentado en una butaca de un cine vacío de preestreno, en búsqueda de su hermanito (Joel, director de la dupla) Entremos en la oscura, siniestra (y no por ello poco atractiva, y diría, todo lo contrario) cabeza de Ethan... ¿Dónde estás hermanito? ¿No puedo encontrarte sino someramente en estas imágenes que adornan mis textos? ¿Por qué le hacés esto a mamá?

Propongo mejor no seguir con este ejercicio, me está provocando jaqueca. Volvamos a un intento de crítica seria, formal. George Clooney descolla. Turturro sigue descollando. El tercero (los protagonistas son tres) descola, a veces. Lo que descola definitivamente son la pretensiones y las faltas de ligazón, de los big brothers y de su última obra. Me explico: James Cameron aparece como productor (o uno de ellos) de la película. Cameron, si, el king of the world. Lo que supone, enseguida, despliegue, fastuosidad de escenas, montajes fulgurantes. Claro los Coen no tuvieron mejor idea que adaptar La Odisea de Homero, y para eso pensaron en... Cameron, quién mejor. La elaboración de tal proyecto podría haberse configurado de manera más asequible, pequeña, y no por eso menos efectiva (menos coherente) Pero está Cameron, y si está Cameron no pueden dejar de esperarse, maremotos, reuniones colosales del KKK, vacas sobre techos de casas, en suma imágenes pomposas, aparatosas, y ahí es donde ingresa el segundo concepto que sugiero, el de falta de ligazón. Si hay algo que los Coen hacen bien, es manejar la ironía, el cinismo, el humor negro. Pero hay maneras (vuelvo a eso de explayar o escatimar el propio ser) La que eligieron esta vez, es la de conmover (en el sentido de sacudir) por medio de las imágenes, dejando en un segundo (tercer) plano a los diálogos. Y si hay algo que los Coen hacen bien, es manejar (por medio del diálogo) la ironía, el cinismo, el humor negro. Esta pretensiosidad escenográfica diluyó esta sapiencia. Sapiencia que imbricada a un sanguinolento gusto estético los ubica (digo, a los Coen) en un lugar intermedio (y por esto, de privilegio) entre la incisiva inteligencia de Allen (Woody) y la banal y grotesca violencia tarantinesca. ¿Dónde estás hermano? vaga inciertamente por ambientes coenianos sin arribar nunca a esa justeza que da el intermezzo. Escenas sanguinolentas, y escenas de aguda lucidez, no llegan a interpenetrarse. Circulan errantemente evidenciando que los Coen están por ahí, pero no logran ensamblar y combinarse fusionando así ese carácter ontológico del ser coeniano. Es decir, son, pero de esa particular no mejor forma de ser. Son los Coen (ahí vienen los Coen, vamos a bailar, y cuando están rockandoleando son los reyes del lugar), aunque hay algunas veces en que no estaría nada mal que los big brothers pergeñen entramados e intrigas para que alguno de los del set de filmación (elegido por la gente al 666-TITANIC) se vaya. 

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